Pese a ser la parte medular de toda la parafernalia que implica hacer una película no es usual hablar de ellos. Sin embargo Lima en Escena charló con el equipo técnico del filme Un mundo para Julius
Las personas implicadas en toda obra cinematográfica no solo se reducen a la participación de sus protagonistas. Hablo de las actrices, de los actores. De la directora. No. El rodaje cinematográfico de una película involucra además la participación de un equipo, un grupo de personas en las cuales recae la responsabilidad de un trabajo peliagudo referido a la realización. Nos referimos al equipo o personal técnico.
Justamente para Lima en Escena es un honor charlar con Gabriel Di Martino (Director de fotografía), Leslie Hinojosa (Diseño de Vestuario), Jorge “Koko” Prado (Primer asistente de dirección) y Cinthya Sosa (2ª Asistente de dirección), el team técnico de la película Un mundo para Julius, cinta que acaba de culminar su rodaje cuyo estreno está previsto para mediados del 2020. Ellos nos cuentan sus experiencias sobre lo que implicó formar parte de la cinta de la directora Rossana Díaz Costa. Fotos: Lima en Escena.
Gabriel Di Martino (Director de fotografía)
Filmar la película Un mundo para Julius, escrita y dirigida por Rossana Díaz Costa, implicó asumir enormes retos. La historia se cuenta desde los años 30 y 40, sin embargo, esta se adaptó a los 50. Era más sencillo empezar a partir de este período. Trabajar la película durante esta época nos permitió encontrar locaciones, vestuario, entre otros elementos vitales para hacer el filme. La casa de Julius la conformaron tres distintas locaciones. Suficientes para contar visualmente la historia. El libro detalla múltiples situaciones y creo que Rossana lo adaptó muy bien. Ella hizo los reajustes y cambios precisos.
El guion pasó de ser una película ideal a una de presupuesto apretado. Nuestra historia es una adaptación del libro del mismo nombre de Alfredo Bryce Echenique que parte de dos mundos bien marcados. Por un lado, el de la servidumbre, y por otro, el de la de clase alta. Visualmente ubicamos a Julius feliz con Vilma, su nana y los criados. Ese es el mundo ideal de Julius. Justamente partimos desde allí. Jugamos con colores cálidos. Acompañamos a Julius y los personajes que están a su lado con acercamiento y movimientos de cámara en contraposición. Su familia no tiene mucho movimiento. Hicimos planos más fríos, estáticos. Ambientes bien marcados.
Hacer una cinta de un libro como Un mundo para Julius es una enorme responsabilidad. Más allá de su popularidad y éxito de la historia está el tema de la desigualdad social, una problemática que le compete e involucra a toda América Latina. Las diferencias de clases, de racismo, de segregación, son temas globales. Problemáticas sociales absolutamente vigentes.
Leslie Hinojosa (Diseño de Vestuario)
Estaba familiarizada con la historia de la novela Un mundo para Julius de Alfredo Bryce porque hace años leí el libro. Estudié el guion todas las veces que llegó a mis manos. Hice una búsqueda de referencias: revistas, libros, fotos. Hicimos un backup de imágenes y con toda esta información visual creamos una propuesta de diseño que se presentó a la directora Rossana Díaz Costa. Trabajé de la mano de la directora de arte Susana Torres. Tengo experiencia en el tema histórico y estoy familiarizada con la época. Me apasiona todo lo referido al tema de vestuario de época, sin embargo, es difícil producir un vestuario de los años 50. Aquí en el país no contamos con almacenes de prendas de época en donde se pueda alquilar las piezas de vestir requeridas. Aquí las prendas la buscamos por todo Lima. También consultamos con determinadas producciones. Algunas ropas las confeccionamos. La película contó con un gran elenco y extras lo cual nos exigió un volumen amplio de prendas. Finalmente, todo quedó espléndido. Ver todo esto en el cine será realmente mágico.
Jorge “Koko” Prado (Primer asistente de dirección)
Un mundo para Julius de Alfredo Bryce Echenique es una novela cinematográfica. Absolutamente visual. Sin embargo, transformar la historia de una novela a un guion de película, a una adaptación cinematográfica, me parece un trabajo significativo. Particularmente, en Un mundo para Julius, la película, el cambio de una historia literaria a una historia de cine me llamó la atención porque deseaba ver cómo la directora y el director de fotografía cuentan la historia a través de sus miradas, sus ojos, sus imágenes. Cómo desde la cámara ven a Julius. Cómo desde el maravilloso lenguaje audiovisual hablan de la historia. Un detalle interesante es el corte histórico. Una bella historia que nos remonta a los cincuenta. De esos años, por ejemplo, ya no existen escenografías. Otro punto anecdótico es grabar con niños. Tener a los niños en el set de grabación es una experiencia fuera de serie.
Lo importante en este tema es cómo la directora mediante su cámara observa todos los universos que componen Un mundo para Julius. Cómo lo transmitió Alfredo Bryce y cómo mediante el lenguaje audiovisual nos lo cuenta Rossana Díaz Costa. Finalmente, Un mundo para Julius es la historia del Perú. Son vivencias sociales presentes a lo largo y ancho del país. Principalmente en Lima. Una Lima que no cambia. Una Lima en donde el tema clasista está perenne en nuestro cotidiano. No se trata de una denuncia, es un punto de vista. La historia de la película es distinta porque mantiene la esencia de la emoción a través de las imágenes.
Cinthya Sosa (2ª Asistente de dirección)
Es mi primera película de época. Leí Un mundo para Julius en la universidad. El primer desafío en este trabajo fue investigar el período, el momento en el que se desarrolló la historia. Cada instante. Cada detalle. ¿Por qué? Porque debemos verificar que cada área realice su tarea y tenga los elementos que la directora necesita durante el rodaje. Mi trabajo es estar pendiente de todos los detalles. Un ejemplo. Cuando nos mandan los documentos de los autos que se van a usar nosotros tenemos que comprobar que el modelo es de los años cincuenta. Un asistente de dirección debe saber los pormenores de todas las áreas.
El guion toma la esencia de la historia. Una historia que habla de nuestra sociedad y todas sus problemáticas. No es sencillo confrontar nuestra naturaleza clasista, racista, machista, violenta… Adaptar un libro de las dimensiones de Un mundo para Julius a una película implica también incentivar a los potenciales espectadores a la lectura, una práctica que estamos perdiendo por la demanda de lo tecnología. Estoy feliz con la película.