El próximo sábado 26, en la ciudad de La Habana en Cuba, la artista visual peruana inaugura la muestra/instalación La encrucijada del hombre nuevo. Una utopía vista en el tiempo
En el marco de la 14ª edición de la Bienal de La Habana/Cuba, organizada por el Centro de Arte Contemporáneo Wifredo Lam, que se celebra hasta el 30 de abril del presente año, la artista visual peruana Sonia Cunliffe, presenta la instalación La encrucijada del hombre nuevo. Una utopía vista en el tiempo. Justamente, sobre la obra, la curadora Dannys Montes de Oca Moreda y la periodista e investigadora Maribel Acosta Damas coinciden en señalar que: “El Hombre nuevo de Sonia puede ser contraparte y complemento del Hombre nuevo del Che al indagar en esos sectores populares donde encontraron el alma de la nación, con sus acervos, sus contradicciones y sus potencialidades en permanente grado de resolución. El Hombre Nuevo de Sonia es la Mujer.”
Al respecto, Lima en Escena charló brevemente con Sonia Cunliffe antes de su viaje a Cuba.
-Sonia, ¿por qué en esta instalación que presentas en la Bienal de Cuba pones en el tapete el tema de la utopía?
– Porque cuando el mundo se vuelca en la desesperanza y por ende en la desmemoria volver a recorrer caminos que descansan en la historia de ciertos lugares, aunque hayan sido o no exitosos, te devuelve la capacidad humana de soñar y conmoverte con los sucesos que algún día acompañaron la intención de iluminar con conocimiento a un país entero. Los faroles chinos que llevaban los jóvenes alfabetizadores de provincia en provincia dan cuenta de ello. Y porque en este camino siempre se generan fenómenos positivos, hay una famosa leyenda guaraní que habla de la búsqueda de la utopía como horizonte, donde lo más importante es el camino recorrido por cada generación. La Utopía es eso como dice el paraguayo Tizio Escobar, es el no lugar, el horizonte, las ganas de siempre.
– ¿Desde qué punto este trabajo visual articula con esta coyuntura sanitaria global?
– Esta obra pensada desde la utopía, tiene a las mujeres como sus protagonistas, transformadoras y auto transformadoras, son en estos tiempos, como en todos, las figuras centrales de las epopeyas mundiales por la sanidad. La visibilidad de sus acciones como médicas, enfermeras, científicas y sostenedoras de sus hogares, no deja dudas de que son ellas el núcleo de la sostenibilidad del planeta. Y aquellas mujeres que siendo casi unas niñas fueron a alfabetizar en Cuba a todas partes, son las madres, las abuelas de las que hoy crean vacunas y ponen cada día su vida en riesgo, para salvar a otras hijas y nietas que mañana seguramente harán lo mismo de ser necesario, en un ejercicio de legado y memoria que esta obra busca transmitir.
– ¿Qué papel juega la mujer en este nuevo trabajo?
-En la encrucijada del hombre nuevo, una utopía vista en el tiempo, se superponen los relatos de tres mujeres, Sara Gómez Cineasta Cubana, Migdalia Calvo, alfabetizadora de la época, y el mío; relocalizamos el papel de las mujeres como cuencas inagotables de memoria, experiencia y emotividad.
