Y aquí estamos a poco más del esperado Bicentenario con tanta incertidumbre como país y con muchas heridas abiertas como sociedad, que cuando uno encuentra obras maravillosas como “Qoyllurit´i, los hijos de la montaña sagrada” que son muestra del trabajo, dedicación, arte de su creador, no queda más que rendirse y compartirlo
Por: Romina Paredes
“Qoyllurit´i, los hijos de la montaña sagrada” es el fotolibro, fruto de 9 años de trabajo de Miguel Mejía Castro (Lima 1978), donde la fotografía es el testimonio visual del desarrollo de la unas de las festividades más importantes de nuestro Patrimonio Cultural: la peregrinación hacia el Santuario de Qoyllurit´i ubicado en la región de Cusco. Además en el 2011, la Unesco la declaró Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.
Mejía Castro, nunca imaginó que el viaje que inició en el 2012 para hacer un reportaje a la festividad cuando laboraba en un diario local duraría tanto. “Jamás imaginé que aquel viaje se extendería hasta hoy…Sin embargo durante la cobertura experimenté un cambio espiritual que me acompaña desde entonces e impulsa mi retorno cada año” sostiene en su libro.
En la época colonial el rito fue manipulado, intervenido y modificado, de modo que los antiguos peruanos se vieron obligados a incorporar algunas costumbres católicas. En la actualidad, visto de manera superficial, parecería que lo andino y lo católico conviven, pero lo cierto es que cada devoto, cofradía, grupo o familia profesa una fe muy peculiar, donde cada quien decide asociar o disociar ambos credos.
Registro de un Paisaje Sagrado
El libro nos muestra a través de 152 fotografías de carácter documental tomadas entre el 2012 y el 2020, una visión antropológica – etnográfica de la peregrinación y se convierte además en el registro oficial de un paisaje sagrado que nunca volverá a ser el mismo por la amenaza de las concesiones mineras y los estragos del calentamiento global.
Como dice Roberto Ochoa en la presentación, hay un antes y un ahora. El autor aborda en un capítulo el cambio climático, llamando a la reflexión luego que en el 2016 al acceder al manto nevado de Qolqepunku, los peregrinos lo encontraron gravemente erosionado por el cambio climático, debiendo modificarse los patrones del rito.
Señala su autor en una entrevista que “Qoyllurit´i, los hijos de la montaña sagrada”, motiva el amor por el Perú, pero también invita a valorar a peruanos como Miguel Mejía que con sus proyectos e iniciativas nos muestran el país que somos y que queremos preservar en el Bicentenario.
