Galería Marcial, espacio virtual de exposiciones del sitio web de Canal Museal presenta además del conjunto de obras y selección de poesías, recursos interactivos como un audiolibro y el poemario en formato digital. El recorrido se inicia con la propuesta en acuarela sobre cartulina del pintor ayacuchano Javier Ramos Cucho quien revela el sentir de la totalidad del libro consolidando la polaridad encierro y libertad.
Toque de queda es una propuesta de 14 artistas peruanas y peruanos de diferentes disciplinas de las artes plásticas, quienes han sido convocados para crear una obra a partir de los micro poemas del libro álbum digital del mismo nombre, de la escritora Melissa Ghezzi. Este título es el espacio de sobrevivencia de la voz poética que encarna los sucesos, un amasijo de sensaciones dentro de un estado de emergencia. La exposición colectiva es para Ghezzi una manera de darle la vuelta a la crisis, de crear sobre lo indecible, de sobrevivir con todas las herramientas posibles al encierro y una luz en un espacio de muchas sombras.
Los artistas que conforman la muestra son: Luz María Acosta, Marianne Barton, Pamela Canal, Sonia Céspedes Rossel, Andrea Corpancho, Bita Chiesa, Julissa Moscoso, Veronica Noriega, Sebastián Poggi, Pablo Quevedo, Javier Ramos Cucho, Iliana Scheggia, Arturo Solís. Ghezzi, creyente de la numerología, trabaja sus poemarios con números de poemas múltiplos de 7, siendo este caso un conjunto de 49 micro-poemas, 7 veces 7, haciendo honor a su número en la numerología. Tras la creación de los textos, estos fueron enviados a los(as) artistas convocados(as) a quienes se les propuso elegir uno o más de un texto que más les había impactado y desde allí fueran transformados en piezas de arte con diversas técnicas y procesos creativos, recreando los poemas en sus propios lenguajes artísticos.
“Tuve el honor de ilustrar la portada del libro. Meli y yo tenemos una amistad de muchos años. Más que al poemario conozco al ser humano detrás del poema, conozco a la mujer detrás de la literatura. Todo ello me aventuró a una ilustración colorida, una odisea festiva, una simbiosis entre el drama y lo lúdico. Un poema es después de todo una hermosa ficción realista, que requiere imaginación para leerla, para comprender y para degustar con el paladar de la fantasía. Dicho esto, mi ilustración pretende humildemente ayudar al digno lector en su viaje por las ondas orlas de Toque de queda.” Javier Ramos Cucho