Lima en Escena charla con la historiadora y artista visual que conserva la autobiografía, cartas, fotos y otros documentos inéditos de la destacada feminista, filósofa, indigenista, política y periodista
Dora Mayer fue una de las figuras intelectuales más importantes de inicios del siglo XX. Su mirada crítica a la sociedad y sus aportes a la filosofía, ciencias, política y literatura fueron admirables. Laboró como periodista en medios como El Comercio, La Crónica, La Prensa y El Diario El Callao. Asimismo, colaboró para la revista Amauta cuyo director fue el recordado pensador peruano José Carlos Mariátegui.
Este 2019 será un año auspicioso para recordar y visibilizar el legado de Dora Mayer. Hace unos meses se presentó el libro Dora Mayer, el sol que disipa las nubes. Textos esenciales, compilación del filósofo y autor Joel Rojas. Asimismo, en el Centro Cultural Inca Garcilaso, se lleva a cabo la exposición Dora Mayer, la perseverancia femenina frente a su tiempo. Una muestra temporal organizada con el apoyo de instituciones como la Biblioteca Central de la UNMSM, el Centro de la Mujer Flora Tristán, entre otros.
Al respecto charlamos con la historiadora y artista visual Alionca Respaldiza, quien en su biblioteca familiar conserva la autobiografía, cartas inéditas, y fotos de la pensadora de origen alemán.
-Alionca, ¿cómo llegó a su biblioteca familiar la autobiografía, cartas, documentos y fotos de Dora Mayer?
-A través de un entrañable amigo de mi padre…
-Nos puede contar la historia.
-Sí. El señor Andrés Paredes Luyo fue vecino y alumno de Dora Mayer. Una larga relación que empezó cuando él era niño. Un vínculo amical que se extendió hasta su etapa adulta. Dora y Andrés desarrollaron una relación madre/hijo. Ella empieza a darle clases de inglés. Más adelante le enseña literatura y otros cursos. Con el tiempo el chico se vuelve su secretario. Pasan los años y Dora envejece. Ya en avanzada edad decide darle a Andrés su autobiografía, su correspondencia, sus fotos y documentos. Paredes Luyo empieza a militar en el Partido Comunista Unidad. Paralelamente, estudia Educación en la Universidad Nacional de Educación Enrique Guzmán y Valle (La Cantuta) durante el período del rector Walter Peñaloza. Años en los cuales el nivel académico de esta casa de estudios era alto. Paredes Luyo estudió con mi padre en La Cantuta. Militaron juntos en el PC y también trabajaron en el sector educación. Ellos mantienen su amistad hasta el hoy en día. En un momento don Andrés le entrega a mi papá esta documentación que le dejó Dora. Mi padre intenta que estos documentos salgan a luz y no tuvo respuesta de ninguna institución y personas a las que acudió. Fue recién en el año 1992 que el historiador Pablo Macera publica parte de su autobiografía. Ahí quedó todo. Actualmente y después de una serie de trámites estos documentos pasarán a la biblioteca del Centro de la Mujer Flora Tristán para su uso público.
-La autobiografía de Dora Mayer aún forma parte de su biblioteca familiar. Desde su posición de historiadora. ¿Cuál es la importancia de este original documento?
-La autobiografía de Dora Mayer es un documento importantísimo porque constituye una fuente histórica rica, diversa y directa para el campo de la investigación. Se trata del manuscrito original de una académica autodidacta que nos hace un análisis de cómo funcionada la ciudad en su época. Hablo de Lima y el Callao. Ella cuenta cómo actuaban los políticos, la gente y los artistas de ese período. Aborda también temas internacionales. Los valores sociales. La injusticia social por la que atravesaba la población indígena.
-El mayor interés de su parte es que la autobiografía la puedan consultar los académicos y estudiantes.
– ¡Claro! Esta nutrida información debe estar al alcance de los investigadores, de los estudiantes y del público. Los estudiosos deben revisar esta fuente y rescatar toda la información de la época que la autora ofrece para efectos de visibilizar su trabajo inédito, su legado. Espero también que se puedan publicar más libros sobre sus textos, artículos, entre otros documentos que aún se conservan.
-Usted es una de las pocas personas que ha leído este documento. Podría hablarnos de Dora Mayer desde la lectura de sus memorias…
-Dora fue una mujer distinta y extraña para su época. Debo señalar que ella vivió alejada de un entorno social externo. Sus padres la criaron en su casa. No pisó un colegio. Su círculo familiar lo conformaron sus padres y su tía. Ellos le enseñaron inglés, francés, alemán. Estudió cursos fundamentales como aritmética, filosofía, geometría, literatura inglesa, literatura alemana. Leía narrativa y poesía. Sus lecturas las desarrollaba en las lenguas originarias. Aprendió a pintar y a bordar. Ella salía en compañía de sus familiares. Nunca sola. No pudo hacer una vida social libremente. No tenía amigas. Su madre murió cuando ella tenía 27 años. Fue en ese momento que asume su libertad en todo su esplendor. La defensa de la población indígena fue su principal lucha. Ella se identificó plenamente con nuestros pueblos originarios maltratados y explotados a lo largo de nuestra historia. El desarrollo académico de Dora fue realmente admirable.
-Pese a formar parte de una Lima pacata, machista y convencional, algunos académicos valoraron la obra de Dora Mayer, ¿no?
– ¡Por supuesto! Los Miró Quesada la respetaban. Ellos le dieron tribuna en sus páginas en donde publicó un sin número de artículos sobre coyuntura política local e internacional. Alrededor de 50 años colaboró para el citado diario … Víctor Larco Herrera fue un político que valoró y apreció a Dora. La visitó hasta el final de sus días. En esas visitas le dejaba 100 soles como una manera de ayudarla económicamente. De otro lado, tejió amistad con algunas intelectuales feministas de la época. María Jesús Alvarado, Magda Portal, entre otras. Colaboró en una serie de revistas de la época: Amauta, Concordia, Mundial, Variedades. ¡Una pensadora admirable!
– Este 2019 es particularmente especial por la reciente publicación del libro “Dora Mayer, el sol que disipa las nubes. Textos esenciales” y además se realiza la exhibición “Tras la huella de Dora Mayer”, muestra en la que usted participa. ¿Es oportuno y justo visibilizar sus obras?
– ¡Absolutamente! A lo largo de los años Dora Mayer ha sido relegada, invisibilizada injustamente. Este 2019 es especial porque además de la muestra que refiere se realizarán una serie de actividades en honor a ella. Se preparan homenajes a su persona y legado lo cual me parece oportuno. El filósofo Joel Rojas anunció también que en los próximos meses publicará la continuación de su libro “Dora Mayer, el sol que disipa las nubes. Textos esenciales”.
-En la muestra “Dora Mayer, la perseverancia femenina frente a su tiempo” participa con una obra. ¿Es un tributo?
– Desde mi labor de artista visual y como una manera de visibilizar su legado decidí trabajar unos cuadros en base a unas fotografías de ella. Son fotos intervenidas. Unos retratos hermosos que Joel Rojas encontró en la biblioteca del Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán.
Foto: archivo Flora Tristán
– ¿Qué técnicas aplica en estas fotos intervenidas?
-El bordado. En la imagen intervenida bordé pequeños textos de ella alrededor de la parte superior de su rostro. Son las ideas de Dora que se contemplan en el cuadro. Esta obra forma parte de una serie de cuadros cuyo motivo es la foto de Mayer intervenidas con otros diseños más coloridos y con otros mensajes. Estos trabajos los expondré más adelante.
– ¿Los textos corresponde a sus artículos, sus libros o su autobiografía?
-Son textos tomados de su autobiografía. Son fragmentos que desde mi particular punto de vista son importantes. En estas obras es imposible la composición artística sin la presencia de sus ideas.
-¿A qué responde este interés de su parte por visibilizar a Dora Mayer?
– Todo este interés responde a mi formación de historiadora. Cuando estudié Historia en San Marcos me gustó el curso Fuentes. Creo que la autobiografía de Dora Mayer no debería estar en una biblioteca familiar sino ponerse en uso público. Con diferentes bibliotecas gestiono la posibilidad que se digitalice este valioso documento para ponerlo a disposición de los estudiosos y estudiantes interesados en el tema.
-El historiador Pablo Macera tuvo la primera iniciativa de publicar su biografía, ¿no?
-Sí, Pablo Macera publicó la autobiografía en tres tomos. Esto fue en la década de los ochentas. Esta edición esta fuera de circulación. Se agotó. La autobiografía que tenemos en nuestro archivo familiar contiene otro capítulo más. Figuran además otros manuscritos que ella dejó.
– A propósito de estos temas se gesta un proyecto a mediano plazo. Podría hablarnos de qué se trata.
-Sí. Uniremos el archivo de Dora Mayer que tenemos en cuidado con el de la biblioteca Flora Tristán. Toda esta documentación será catalogada. Es un proyecto a mediano plazo.
-Finalmente, ¿qué cualidades de Dora Mayer destaca?
– Su fortaleza. Dora siempre habló claro y directo. Fue una mujer moderna para su tiempo. Una intelectual admirable. Lo que hizo en 1930 fue revolucionario. Se ganó el respecto de los intelectuales y políticos de la época. Fue una mujer valiente. Dijo lo que pensó hasta el final.
“Dora Mayer, la perseverancia femenina frente a su tiempo”
Centro Cultural Inca Garcilaso.
Lugar: Jr. Ucayali 391, Centro Histórico de Lima.
Horario: de martes a viernes de 10:00 a.m. a 8:00 p.m., y sábado, domingo y feriados de 10:00 a.m. a 6:00 p.m.
Hasta el 8 de febrero.
Ingreso libre.