Anahí Barrionuevo: “Se debe acelerar la inclusión de libros escritos por mujeres”

Una de las editoras y difusoras de la lectura más importantes en nuestro país en una charla con Lima en Escena. Fotos: Rosana López Cubas

Desde hace veinticinco años, incluso antes de egresar de la especialidad de Literatura de la Universidad Católica, Anahí Barrionuevo se dedica a la edición, y ha recorrido prácticamente todas sus variantes. Ha hecho revistas, fascículos y diccionarios literarios, enciclopedias históricas, infantiles o escolares; los libros en general son lo suyo.

Ha editado en el Perú a escritores como Ryonosuke Akutagawa, Henry James o Franz Kafka; a João Guimarães Rosa, José Lezama Lima o Rosario Castellanos; y a escritores peruanos como César Vallejo, Ciro Alegría, Luis Loayza, José Diez Canseco o Jorge Eduardo Eielson, entre muchos otros. Ha trabajado en editoriales nacionales e internacionales, y en distintos proyectos de la mano de editores y especialistas como Ricardo Silva Santisteban o Ricardo González Vigil, a quienes considera verdaderos maestros.

Pero más allá de los libros, su verdadera obsesión es la mayor difusión de la lectura en nuestro país. Hasta hace algunos meses atrás dirigió el programa de televisión Entre Libros. Desde el año pasado asesora a la Cámara Peruana del Libro en la preparación de su programa cultural para la 23 Feria Internacional del Libro de Lima, evento que se desarrollará del 20 de julio al 05 de agosto. Al respecto, Lima en Escena charló con Anahí Barrionuevo.

-Anahí, ¿cuáles son tus expectativas para esta FIL 2018?

-Se vienen afianzando algunos procesos referidos a su programación cultural. La feria es el foro de discusión de ideas más importante a nivel nacional y en esto es fundamental la recepción cada vez mayor de figuras literarias destacadas, pero también de escritores dedicados a la divulgación de la ciencia, a los temas políticos, entre otros campos del conocimiento. Igualmente llegan notables profesionales asociados con el libro y con el fomento de la lectura. Y esto en cuanto a la participación internacional, porque también hay un lado nacional y en eso se busca involucrar cada vez más a los escritores peruanos. También se cuenta, por supuesto, con el compromiso de las editoriales, en su papel de expositores y difusores. El objetivo final de todo esto es el fortalecimiento de la institucionalidad del libro en el Perú.

-Este 2018 España es el país invitado. ¿Qué nos puedes decir al respecto?

-España nos visita con una delegación de 40 escritores, entre los cuales figuran narradores, poetas, dramaturgos, booktubers, youtubers, voceros de la ciencia… La presencia de autores de diversas generaciones es fundamental: hay escritores consagrados y jóvenes, con carreras clásicas y otros con trayectorias novedosas, surgidos, por ejemplo, de las plataformas digitales. Será interesante para visitantes y lectores entrar en contacto con lo más actual de un país con el que tenemos antiguos lazos históricos.

-En paralelo participan, como cada año, los escritores de casa.

-¡Son imprescindibles! Ellos deben saber que, ante todo, esta es su feria. Son los anfitriones y por eso tienen un papel protagónico. Anualmente se procura convocar a un grupo amplio y diverso en generaciones y en tendencias. En este momento existe todo un movimiento de escritores y escritoras locales en pleno proceso de crecimiento. El público los conoce, los identifica y los sigue. Contar con ellos en la tarea de la difusión de la lectura es clave. Porque esa es la gran valla que debemos atravesar: que se lea más.

-Tomando como referencia tu larga labor como editora, ¿cómo observas el catálogo de los grupos editoriales internacionales, que cada año incorporan más títulos de escritores peruanos?

-Las editoriales internacionales se han dado cuenta de que los lectores peruanos buscan autores peruanos. Lo mismo pasa en todos los países: siempre hay preferencia por la producción local. Pero hasta hace quince años, estas editoriales apenas publicaban entre dos y cinco títulos de autores peruanos al año. Eso ha cambiado y hoy se incluyen hasta treinta títulos locales.

-Sin embargo no se publica a autores y autoras de manera equitativa.

-Existe aún un desbalance. Eso es innegable. Se publica más a escritores. E incluso las escritoras suelen quedar arrinconadas en ciertos temas. Hay muchas explicaciones para esto, pero en cualquier caso, las editoriales en general tienen que hacer un esfuerzo al respecto. Recuerdo que cierto año seleccioné y edité hasta diez libros de escritoras peruanas, incluso de temas económicos. Pero ese esfuerzo requiere decisión e interés, en posicionarlas, en promoverlas. Todas las editoriales, idealmente, deberían comprometerse con ese objetivo y acelerar la inclusión de libros escritos por mujeres.

-Aún no se estudia a profundidad a las autoras contemporáneas de las diversas regiones.

-Autoras y autores, diría. La literatura peruana contemporánea está tremendamente centralizada. Hay iniciativas para volver a descentralizarla, pero aún es un tema pendiente. Si se revisa el escenario literario peruano de los años cincuenta, sesenta o setenta, se observa a autores de Arequipa, Apurímac, La Libertad, Loreto, Piura… Eso no ocurre ahora, y debe cambiar. Los actuales e interesantes movimientos libreros y editoriales en La Libertad, Áncash, Junín, Arequipa, Ayacucho, Cusco, y recientemente Loreto, donde se realizan ferias del libro anuales, se deben fortalecer e integrarse en el diálogo nacional. Para eso se necesita el compromiso no solo de la empresa privada, sino también de los gobiernos regionales y del gobierno central. De manera conexa se impulsaría el trabajo de escritores y escritoras de todo el país, no solo de Lima.

-Me comentabas al inicio de nuestra charla sobre la importante presencia de escritoras a lo largo de la historia.

-¡Claro! Las mujeres han estado presentes en la escritura desde siempre. En el Japón tradicional del siglo XI, en la Europa medieval, en la Inglaterra victoriana del siglo XIX… Y lo mismo en el Perú. Sin embargo, se suele afirmar que las mujeres no han tenido presencia en el campo de la literatura. No me parece. Debemos dejar de reforzar ese discurso, profundamente masculino, que acentúa la menor visibilidad femenina. Eso es lo que han querido contarnos. La historia debe rescribirse y debemos rescribirla las mujeres.

-¿Las editoriales son inclusivas o solo publican a determinados autores?

-O autoras… Las editoriales en general tienen que ampliar su capacidad de convocatoria. Sus catálogos tienen que apostar en primer lugar por la calidad, y en segundo lugar por la diversidad, entendida de la manera más amplia, para generar nuevos autores y, sobre todo, nuevos lectores. No todas tienen este compromiso. Y considero que, si desean crecer, deberían tomarse en serio esto, no solo respecto de incluir más mujeres, sino también de tomar en cuenta a la literatura LGTB, a las tradiciones afroperuana, tusán, niséi, o a la regional, que mencionábamos antes…

-Las editoriales independientes se consolidan año a año. Contamos con sellos especializados en poesía, narrativa, cómic, entre otros géneros. ¿Cuál es tu percepción de este desarrollo sostenido de algunas editoriales pequeñas?

-Las editoriales independientes realizan un gran trabajo. Dinamizan el sector editorial, especialmente dando mayor cabida a nuevos autores, abriéndose a temas distintos, o haciendo propuestas comerciales novedosas. Sí se debe reflexionar también sobre los puntos flacos de las editoriales independientes. Me refiero a los aspectos administrativos y financieros, en los que suelen carecer de estructuras y que deben fortalecer para alcanzar mayor continuidad.

-De otro lado, en estos últimos años vienen destacando autoras jóvenes…

-Sí, y están conviviendo con escritoras de generaciones tremendamente interesantes, y que están vigentes y activas. Este diálogo entre escritoras de diferentes generaciones solo puede ser enriquecedor. Ahora, si consolidar la continuidad es el mayor reto de cualquier escritor, en el caso de las mujeres es un reto aun mayor: escribir con frecuencia y sostener esa tarea a lo largo del tiempo.

-¿Cuál es tu opinión respecto de las estéticas literarias, o sobre la diversidad de temáticas que pueblan nuestra literatura actual?

-En cuanto a temáticas, estéticas y géneros nuestra literatura debe ser diversa. No puedo imaginar un país que escriba desde una sola óptica, sobre una sola temática o en un solo género. El Perú no cuenta aún con una diversidad literaria suficiente, y por tanto editorial. No existe entre nosotros, por ejemplo, una larga tradición de novela histórica; apenas hemos tenido unos pocos escritores dedicados a ese género. Lo mismo sucede con la literatura fantástica, la erótica, la policial, la no ficción o con la ciencia ficción. Tenemos que ampliar nuestro universo literario, generar y sostener tradiciones más fuertes.

-¿Funciona el Plan Lector?

-Para las editoriales sí. Si bien desde el Ministerio de Educación ha habido marchas, contramarchas, detenciones y apresuramientos, este ambicioso e interesante proyecto quedó felizmente grabado en los colegios públicos y privados, y se entendió que la lectura es el gran medio de aprendizaje.

Periodista y fotógrafa. Siguió la carrera de Comunicación Social y Periodismo Económico. Laboró en los diarios La Voz, Síntesis, Gestión y en la revistas Oiga. El 2000 fundó el portal digital MIAMI EN ESCENA (Florida, Estados Unidos) en donde radicó 10 años. A su retorno al Perú crea el magazine online LIMA EN ESCENA.